En nuestro día a día observamos multitud de símbolos que nos facilitan la comunicación: el encendido y apagado de los dispositivos electrónicos, el stop o ceda de la carretera y el símbolo de Möbius de reciclaje son algunos de los más comunes.
En este post exploraremos el origen y el significado de este último, así como el impacto que ha tenido desde su creación.
¿Qué es el símbolo Möbius?
Antes de adentrarnos en la especificación del símbolo del reciclaje, vamos a hablar sobre la idea de origen: el símbolo Möbius.
Aunque tal vez no te suene, seguro que en más de una ocasión lo has visto. Se trata de una figura geométrica que se crea al coger una tira de papel, darle un giro de 180 grados y luego unir sus extremos. De esta forma se obtiene una figura que solo tiene una cara y un borde.
La peculiaridad de tener una sola cara hace que desafíe nuestra intuición espacial habitual tridimensional al no establecer una distinción clara entre “arriba” y “abajo”.
Este símbolo fue creado en 1858 por los matemáticos alemanes August Ferdinand Möbius (1790-1868) y Johann Benedict Listing (1808-1882), y desde entonces se ha convertido en un símbolo único y reconocible, empleado tanto en la ciencia y las matemáticas como en el arte, la cultura, y el reciclaje.
Un ejemplo de ello son los famosos grabados de M. C. Escher.
El símbolo de Möbius se utiliza para representar un proceso sin fin: la continuidad y la conexión infinita. También es un poderoso emblema de unidad y dualidad filosóficas.
Origen del símbolo del reciclaje
Se trata del símbolo del reciclaje más famoso y conocido, ya que está presente en infinidad de productos y envases.
Su origen se remonta a 1970, cuando se celebró por primera vez el Día Mundial de la Tierra. Como homenaje, la empresa fabricante de cartón Container Corporation of America (CCA) de Chicago lanzó un concurso a nivel nacional dirigido a los estudiantes de arte y diseño con el objetivo de idear un logo que simbolizara el proceso de reciclaje de papel, al que se presentaron más de medio millar de estudiantes.
El ganador fue Gary Anderson, un joven de 23 años que estudiaba arquitectura en la University of Southern California, presentando la banda de tres flechas entrelazadas entre sí que conocemos hoy en día.
En una entrevista que dio al Financial Times en 2012, aseguró haberse olvidado por completo de su creación hasta que siete años después de graduarse aterrizó en Ámsterdam y vio su símbolo impreso en un gran contenedor con forma de iglú.
Resulta irónico cómo una idea que apenas le llevó un par de días diseñar ha pasado a la historia del diseño y la humanidad.
Desde entonces, este símbolo ha sido ampliamente utilizado para identificar productos reciclables y promover la conciencia sobre la importancia del reciclaje para fomentar la sostenibilidad y la conservación del medioambiente.
Cada una de las flechas simboliza un paso del proceso del reciclaje: recogida de residuos, tratamiento y compra de productos reciclados. De esta forma, el sistema continúa una y otra vez de forma cíclica.
El compromiso de Andersen con el reciclaje siempre ha estado presente en su vida. Cuando era joven, su familia se vio obligada a vivir con lo justo y necesario tras la Segunda Guerra Mundial, haciendo de la reutilización una máxima. En la actualidad, no se dedica profesionalmente al diseño sino a la arquitectura urbana creando espacios vinculados al medioambiente.
Otros símbolos de reciclaje
Además del símbolo de Möbius, existen otros símbolos de reciclaje que se utilizan en diferentes regiones, sistemas y materiales que tienen como objetivo identificar los productos reciclables y alentar a las personas a participar activamente en el proceso de reciclaje para reducir la generación de residuos y el impacto medioambiental.
Algunos de los más conocidos son los siguientes:
- Punto verde: dos flechas entrelazas entre sí que representan un ciclo que se repite. Fue creado en Alemania al comienzo de la década de los noventa, para más tarde extenderse a todos los países miembros de la Unión Europea con el fin de identificar los productos cuyos fabricantes cumplen con la Ley 11/97 de Envases y Residuos de Envases. Esta norma garantiza que los envases se reciclarán mediante el Sistema Integrado de Gestión de Residuos de Envases (SIG) gestionado por Ecoembes en España.
- Tidyman u “hombre limpio”. Símbolo antropomórfico en el que se representa a una figura un humana depositando basura en una papelera. Apela a la responsabilidad que tenemos los ciudadanos de depositar los residuos en el contenedor adecuado.
Estos son los más extendidos para representar la reciclabilidad de los productos.
El resto de residuos, también tienen sus propios símbolos: el plástico, el vidrio, los metales, los componentes electrónicos, los medicamentos…
De esta forma, es fácil saber si un envase debe ir al contenedor amarillo, a un punto limpio o a un orgánico.
Naeco fomenta el reciclaje para la mejora del medioambiente
Como empresa comprometida con la economía circular y la sostenibilidad, en Naeco estamos orgullosos de fomentar el reciclaje como una estrategia clave para mejorar el medioambiente y abordar el cambio climático.
A través de la fabricación de palets de plástico bajo los principios de economía circular, en Naeco impulsamos el uso de materiales reciclados y buscamos prolongar la vida útil de los productos. Al fomentar activamente el reciclaje y la producción sostenible, contribuimos a reducir la cantidad de residuos plásticos y minimizar el impacto ambiental, en línea con lo que representa el símbolo de Möbius y su conexión con la economía circular.
