A ello hay que sumar la mayor concienciación social y el compromiso medioambiental adquirido por gran parte de las organizaciones, dos puntos prioritarios en la actualidad.
Por ello, el uso de materiales y la aplicación de sistemas de producción y logística más sostenibles se han convertido en una obligación por parte de las compañías. Pero ¿qué se entiende por logística verde aplicada al almacenamiento? En Naeco te lo explicamos.
¿Qué es el almacenamiento verde y qué beneficios aporta al área logístico?
El almacenamiento verde es un concepto bastante extendido hoy en día y que se refiere fundamentalmente a todas aquellas prácticas eco-friendly que se llevan a cabo en la cadena de suministro y en la zona de almacenamiento con el objetivo de proteger el medioambiente.
Está demostrado que desarrollar y gestionar iniciativas sostenibles y ecológicas es positivo para la salud de nuestro planeta, hace que las empresas sean más competitivas y estén mejor valoradas en el plano social y que, por tanto, generen más beneficios económicos. Esto anima a las organizaciones a obtener todo tipo de certificados que acrediten su compromiso medioambiental.
Para conseguirlos es necesario aplicar medidas que fomenten la sostenibilidad, así como optimizar las instalaciones, incluidas las dedicadas al almacenamiento, basándonos siempre en criterios más ecológicos.
Factores clave en el diseño de un almacén verde y sostenible
Para tener un almacén más ecológico es necesario planificar una estrategia que permita optimizar espacios y ahorrar costes energéticos. A continuación, exponemos algunas de las medidas y tendencias más extendidas en favor del almacenamiento verde y la sostenibilidad logística:
- Aprovechamiento de la luz natural o iluminación de bajo consumo. Contar conuna buena instalación lumínica es crucial a la hora de conservar y ahorrar energía en el interior de un almacén.Entre las soluciones más económicas y sencillas destacan los tragaluces, que permiten que entre la claridad del día. Los paneles solares (que generan energía limpia) y los sensores LED (que se activan con el movimiento y pueden colocarse, por ejemplo, en lámparas de bajo consumo) son otras opciones muy interesantes para disminuir costes, controlar el consumo energético y ser menos dependientes de los combustibles fósiles, clave para reducir las emisiones de carbono.
- Instalar puertas aislantes que bloqueen la transferencia de calor o frio. Mediante este tipo de puertas evitaremos que se escape el frío o el calor del interior del almacén. De esta manera, mantendremos la temperatura adecuada y reduciremos la factura energética.
- Palets de plástico reciclables y reutilizables. Utilizar palets reutilizables, fabricados con plástico reciclado y reciclables al final de su vida útil en el almacén, nos ayudará a reducir de manera drástica los residuos y el impacto medioambiental. Además, estos palets son perfectos para la automatización, ya que son livianos y tienen un peso y tamaño uniformes, por lo que facilitan la manipulación, calibración y distribución de la mercancía.
- Sistemas de almacenamiento y recuperación automatizados. El uso de herramientas automatizadas en almacenes reduce el riesgo de sufrir errores humanos, mejora la eficiencia y ahorra costes en devoluciones de producto. Además, minimiza las emisiones de carbono, optimiza el espacio de manera más eficiente y reduce el uso de energía.
Estas son solo algunas de las medidas que se pueden llevar a cabo si queremos disponer de una instalación de almacenamiento verde y sostenible. Se trata de una inversión con gran potencial que mejora el impacto medioambiental, la rentabilidad económica y la reputación de cualquier empresa.